martes, 3 de abril de 2012

Córdoba, el Valle de los Pedroches y algunas de sus maravillas + Solomillo Wellington

En casa, siempre hemos sentido cierta vinculación con Córdoba. Esto se debe en gran parte a tener un trocito de nuestra familia allí, pero también porque es una ciudad encantadora. La comarca del Valle de los Pedroches se extiende por el norte de la provincia limitando con Badajoz y Ciudad Real, y en ella se encuentra Pozoblanco, sede de la emblemática empresa COVAP.
Hace unos días, me puse a navegar por su web, y descubrí que tenía una visión equivocada de esta cooperativa andaluza. En mi mente cuando escucho COVAP, automáticamente aparece el brick de leche con la imagen de esa simpática vaquita verde que me ponía mi abuela para merendar (si, ella compraba leche desnatada jeje). Para mi sorpresa, la variedad de productos que ofrecen al mercado es mucho mayor, y no se centra exclusivamente en los lácteos y sus derivados.
Como buena andaluza, me propongo ayudar a difundir la marca y sus muchas maravillas.
Al situarse en pleno corazón de Sierra Morena, los cerditos tienen el privilegio de alimentarse de las abundantes bellotas que producen las encinas que se encuentran en los más de 3.500 km2 que abarcan la comarca. Esto los convierte en unos cerditos número 1 por lo que si quieres comprar ibéricos, no encuentro mejor opción. Ya se trate de paleta de bellota o jamón de recebo, conquistareis vuestros paladares y los de los que os rodean. 
Y para aprovechar los productos que nos brindan, una receta a la altura...




INGREDIENTES:
1 lámina de hojaldre
1 solomillo de cerdo
Champiñones
Paté Ibérico
Jamón
1 huevo
Sal, Pimienta y aceite




ELABORACIÓN:
En primer lugar salpimentamos el solomillo y lo marcamos en una sartén con un poco de aceite. Cuando pierda el color rojizo, lo apartamos del fuego y lo dejamos enfriar.
A continuación, lavaremos los champiñones para quitarles la posible tierrecita que puedan traer, y los laminaremos. Los salteamos en la misma sartén con un poco de sal y pimienta. Cuando estén listos, los dejaremos enfriar en un colador para que se escurran bien.
Es el momento de poner a calentar el horno! 190º-200º aproximadamente.
Cuando el solomillo y los champis estén fríos, es la hora de montar el rollo. Para ello, estiraremos el hojaldre sobre la encimera, y untaremos el paté en la mitad de la lámina.
Continuaremos poniendo los champiñones sobre el paté, y el solomillo "envuelto" en las lonchas de jamón en último lugar. 
Cerraremos el rollo de hojaldre, y decoraremos con los recortes que nos hayan sobrado. Pincharemos con un tenedor para que no se infle demasiado, y pincelaremos con huevo batido para que quede doradito.
Horneamos entre 18 y 20 minutos, o hasta que veamos que el hojaldre está listo.




PRESENTACIÓN:
Dejar enfriar el rollo para poder cortarlo bien. 
Servir una rodaja del mismo acompañado de una guarnición de manzanas glaseadas y un poco de salsa de mostaza a la antigua. (veremos la receta un poco más adelante)




CONSEJOS Y CURIOSIDADES:
Es un plato que puede comerse a temperatura ambiente o calentito, pero recomiendo cortar las rodajas una vez frío pues el hojaldre tiende a desmoronarse en caliente.
Ideal para almuerzos o cenas con invitados, pues se puede tener preparado del día anterior.